En la actualidad es Catedrática emérita de Literatura  española en la Universidad Complutense de Madrid , después de haber ejercido como docente en la Universidad de Granada y haber sido Maitre de Conference en la Universidad de Fez y Directora del Instituto Cervantes de Roma.

Ha recibido numerosos premios y entre otros estudios sus personajes femeninos han sido estudiados en una Tesis doctoral de la profesora Ana Moreno Soriano

Poeta, crítica, narradora.

Entre sus libros de poesía, Retracciones y Reverso en Endymion 1989 Dresde, Madrid, Ediciones Devenir, 1990; 25poemas,FundaciónMálaga,2017.

Entre sus cuentos destaquemos Fuegos de invierno bajo los puentes de Madrid, (Madrid, El tercer nombre, 2006)

Como Crítica, destacamos: Las revistas poéticas españolas (1939-1975), Madrid, Edtorial Turner. Poesía española contemporánea. Historia y Antología (1939-1980), Madrid, Alhambra (en colaboración con José Luis Falcó);

Enttre sus ensayos: El embrujo de amar, Madrid, Planeta, Temas de Hoy. Baeza de Machado, Fundación J.M. Lara. Editora de El Quijote en clave de mujer/es,Madrid,EditorialComplutense. La Taranta minera, Madrid, Huso, 2022

Sus novelas : La sal del chocolate, Barcelona, Seix Barral, 1992; La casa del halcón, Madrid, Alfaguara; El dios dormido, Alfaguara, 1998; El hijo del aire, Barcelona, Planeta, 2001.

Cuenta con traducciones al  inglés, italiano, alemán, árabe, francés y serbio. 

Miriam de Betania, Magdalena, protagonista de “EL DIOS DORMIDO” es mujer notable conocedora de los entresijos del poder del siglo primero y una de las figuras principales del origen del cristianismo, considerada sin lugar a dudas la compañera del denominado en su día “Sanador de Galilea” y al final de su vida primer testigo de la vuelta a la vida del hombre que amó. Se halla en el centro del grupo de rebeldes utópicos que desean crear una sociedad nueva política y religiosa pero que, salvo testimonios directos, durante siglos quedará invisibilizada, denominada “pecadora” cuando no “prostituta arrepentida”, y en los últimos tiempos retenida en la imaginación popular como objeto de consumo bien con perfil de santa muda  o banalmente sexualizada como mujer contemporánea sin atender a los procesos emocionales y culturales de quien mantiene su compromiso transformador frente a la sociedad de su tiempo.

El mundo en el que vive está poblado de  cambios y de resoluciones bélicas por parte de los imperios entonces en liza. Pero ella es sensible a influencia de Roma y de Oriente y tiene que pronunciarse con relación a los  problemas políticos de su entorno como son los provocados por los nacionalistas del norte de Israel que pretenden expulsar por la fuerza de las armas a los romanos o de los naturalistas esenios partidarios de otro tipo de trascendencia. En estas circunstancias su monólogo discurre como una novela sentimental de amor, muerte y consolación salpicada de evocaciones y diálogos integrados a mitad de camino entre literatura comprometida, paganismo y misticismo.

 Marguerite Yourcenar describe este tiempo con esta frase de Flaubert: «Cuando los dioses ya no existían y Cristo no había aparecido aún, hubo un momento único, desde Cicerón hasta Marco Aurelio, en que solo estuvo el hombre”.

 Ante la voz de Miriam de Betania ciertamente entendemos que los dioses todavía seguían dormidos, pero, al parecer, tampoco estuvo el hombre: estuvo su mujer.